Se aprueba la ley de alimentos en Rumania

En estos días se ha aprobado en Rumanía la iniciativa de que por ley los supermercados del país deban ser más nacionales. Esto supone en realidad que más del cincuenta por ciento de los productos que se venden en estos establecimientos tengan que ser a la fuerza de origen rumano, y no de una procedencia ajena a la nación.

Está ley obliga por tanto a los distintos hipermercados y supermercados que hay repartidos por todo el país de Rumanía a que potencien las ventas de productos nacionales relacionados con la alimentación y las bebidas. La carne, la fruta, los huevos y los vegetales que los ciudadanos rumanos compren en los supermercados serán, en al menos un cincuenta y uno por ciento, de procedencia rumana.

El Congreso de Rumanía ha abogado así por la aprobación de la medida merced a los doscientos noventa y tres votos a favor –no hubo ni un solo voto en contra de esta iniciativa- que se han registrado en la cámara parlamentaria del país de los Cárpatos. La ley afectará directamente a aquellos comercios que facturen en el ejercicio anual más de dos millones de euros, lo que excluirá a los mercados más pequeños, a los que se les presupone menor capacidad de importar sus productos.

Mediante esta iniciativa, el poder ejecutivo de Rumanía quiere reforzar el papel de los agricultores y los ganaderos del país. Las cadenas de supermercados se enfrentan ahora a importantes multas de dinero si optan por el incumplimiento de la ley, quedando incluso en el aire la posibilidad de que el comercio que vulnere la ley deba ser cerrado. Diversas franquicias y multinacionales verán cómo tienen que cambiar su política comercial y empezar a echar mano de productos de origen rumano. Carrefour, que en el pasado año se hizo con la cadena de supermercados rumanos Billa Romania, será una de las compañías más perjudicadas por esta medida.